The Silicon Mountain: ¿cómo deben las empresas lidiar con los desechos electrónicos?

Residuos electrónicos
Residuos electrónicos

Los desechos electrónicos son un gran problema. Un problema que ha ido creciendo exponencialmente desde principios de los años 20el siglo cuando las primeras radios caseras llegaron a las tiendas. Desde entonces, hemos estado desechando todo, desde televisores hasta tostadoras, sin pensar en el medio ambiente. Hoy, gracias a la ubicuidad de los teléfonos inteligentes, hay un dispositivo en cada bolsillo y la cantidad de basura generada comienza a alcanzar niveles de crisis. Es más, se prevé que el Internet de las Cosas marcará el comienzo de una era completamente nueva de dispositivos, creando aún más desechos a medida que las baterías se agoten y los dispositivos se desgasten.

En comparación con otros tipos de desechos, los desechos electrónicos presentan una variedad de desafíos. Se trata de dispositivos complejos que contienen múltiples materiales, algunos reciclables y otros no. Además, conceptos como la obsolescencia planificada agravan el problema, lo que garantiza que se genere un flujo constante de desechos año tras año. Está claro entonces que la responsabilidad de lidiar con la eliminación y el reciclaje de los desechos electrónicos recae, no solo en los consumidores, sino cada vez más en los fabricantes y las empresas.

Los desechos electrónicos y su negocio

Las empresas de todos los tamaños representan una proporción relativamente grande de los desechos electrónicos generados cada año. Naturalmente, cualquier empresa con un gran departamento de TI, o que dependa en gran medida de la última tecnología, tendrá una rotación bastante rápida de dispositivos para respaldar sus operaciones. Sin embargo, hay una serie de formas de garantizar que los dispositivos obsoletos e incluso rotos permanezcan fuera de los vertederos y sirvan para algún propósito útil una vez que su negocio haya terminado con ellos.

Reparar o actualizar

El primer paso para reducir la cantidad de desechos electrónicos generados por su negocio es asegurarse de maximizar la vida útil de su equipo existente. Actualizar PC más antiguas con nueva RAM, capacidad de almacenamiento o incluso nuevo software es una forma de extender la vida útil del equipo. Sin embargo, asegurarse de que el equipo dañado sea reparado también es una forma viable de aprovechar al máximo los dispositivos que, por lo demás, funcionan perfectamente. Los teléfonos inteligentes o las computadoras portátiles con pantallas rotas son un ejemplo perfecto, y estos dispositivos no deben desecharse cuando una simple reparación sea suficiente.

Vender

El hecho de que su empresa ya no tenga un uso para los dispositivos electrónicos no significa que otros no lo harán. Las empresas más grandes, en particular, a menudo compran equipos de mayor especificación que duran muchos años, y este tipo de dispositivos suelen tener una gran demanda entre las personas que requieren menos energía bruta. Hay un gran mercado para la electrónica de segunda mano, lo que significa que puede recuperar parte del desembolso en equipos nuevos y asegurarse de que los equipos viejos tengan un nuevo hogar.

donar

Para los equipos y dispositivos que tienen un poco menos de demanda en el mercado de segunda mano, la donación es una opción; incluso existe la posibilidad de que pueda reclamar deducciones de impuestos sobre los equipos donados. Las donaciones pueden organizarse directamente a través de organizaciones benéficas, o como parte de un programa de reciclaje más amplio. Actualmente, existe una gran demanda de tecnologías más antiguas en los países en desarrollo, en particular computadoras, monitores CRT más antiguos y teléfonos inteligentes.

reciclar

Hay ciertos tipos de desechos electrónicos que simplemente no se pueden reparar, vender o donar. Baterías de iones de litio, por ejemplo, o cartuchos de impresora y formatos de medios antiguos. Además, hay casos en los que otros tipos de desechos electrónicos se destinan a la basura, sin otras opciones sobre la mesa. Sin embargo, las empresas deben hacer todo lo posible para garantizar que los desechos electrónicos no terminen en un vertedero. Para pequeñas cantidades de residuos, es casi seguro que el vertedero local ofrecerá algún tipo de instalación de reciclaje. Sin embargo, para grandes cantidades de desechos electrónicos o empresas que requieren recolecciones periódicas, el camino a seguir es un servicio integral de gestión de desechos. Además, en gestión de residuos electrónicos El programa adaptado a sus necesidades específicas puede ayudarlo a identificar formas de disminuir su producción con el tiempo y garantizar que todos los desechos que envíe para reciclar se entreguen a las instalaciones correctas para su procesamiento adecuado.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *